Su trayectoria es corta, lleva poco más de cinco meses en la disciplina pero su dedicación a este deporte y los golpes de la vida (su casa se incendio por completo al volver de un combate en Temperley) le dan la fuerza para ganar como lo hizo en esta oportunidad. Tal vez por eso desobedeció las palabras de su entrenador Cristian Díaz y en lugar de esperar al tercer y último Round se llevó los laureles en el segundo. “Salí a buscarlo del principio, tenía que aguantar al tercero, pero lo quería voltear”. Fue un Knock Out técnico ante los ojos de los presentes, pero dentro de él había mucho más que un mero combate, estaba la fuerza que le dio su familia y sus dos hijos para seguir adelante ante la adversidad, era el triunfo, el titulo y el amor a los suyos, todo en un único instante.
Así este hincha de Tigre, que lleva su camiseta a cada rincón donde le toque pelear, se alcanzó el titulo de Campeón Mundial y no se conforma con eso. Ahora piensa en seguir entrenando de cara a su doble desafío; el próximo Torneo que se disputará en Wilde en el mes de Agosto y el de volver a levantar poco a poco su casa.
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